Viernes, 14 de marzo de 2025 | 1° Semana del Tiempo de Cuaresma

📖 Evangelio según san Mateo (Mt 5, 20-26)

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Si su justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, no entrarán en el reino de los cielos.

Han oído que se dijo a los antiguos: "No matarás", y el que mate será reo de juicio. Pero yo les digo: todo el que se deja llevar de la cólera contra su hermano será procesado. Y si uno llama a su hermano "imbécil", tendrá que comparecer ante el Sanedrín, y si lo llama "necio", merece la condena de la "gehenna" del fuego.

Por tanto, si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda.

Con el que te pone pleito procura arreglarte enseguida, mientras van todavía de camino, no sea que te entregue al juez y el juez al guardia, y te metan en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último céntimo».


🙏 Comentario

Los escribas y fariseos eran cumplidores de la Ley, pero vivían de apariencias. Sus actitudes externas eran muy piadosas, pero su experiencia religiosa no tocaba su interior, tanto que Jesús llegó a llamar sepulcros blanqueados a los fariseos. Ése es el riesgo del cristiano, quedarse solo en las prácticas externas, en la piedad, en la religiosidad, pero sin que su corazón sea transformado, sin que viva en armonía y comunión con los demás.

No matar, un mandamiento que parece estar inscrito en el corazón del hombre (varón y hembra). Sin embargo, Jesús va más allá. No basta con no matar, hay que cuidar las relaciones y evitar los insultos, los odios y los rencores. Los conflictos puede que ocurran siempre, pero lo que les sigue es la reconciliación, perdonar y ser perdonados. Tanto que Jesús lo pone en estos términos: "si cuando vas a presentar tu ofrenda sobre el altar, te acuerdas allí mismo de que tu hermano tiene quejas contra ti, deja allí tu ofrenda ante el altar y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a presentar tu ofrenda."

Quien se vuelve juez del otro, quien se niega a perdonar de corazón, quien se cierra a amar de verdad y se refugia en el odio y el rencor, puede que no entre en el reino de los cielos. La invitación es a abrirle el corazón a Cristo para que Él comience a trabajar en nuestro corazón. Sólo quien se abre a perdonar enserio puede disfrutar de libertad interior. Sólo quien se da la oportunidad de dejarse transformar por Cristo encuentra la paz que tanto anhela.


💌 Mensaje

No basta con no matar, cuando el corazón está armado y alberga odio, rencor y deseos de venganza. Es necesario ir más allá y trabajar en el perdón (dado y recibido) para gozar de buenas relaciones con todos. De lo contrario, no valen las ofrendas.

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