Jueves, 27 de febrero de 2025 | 7° Semana del Tiempo Ordinario
📖 Evangelio según san Marcos (Mc 9, 41-50)
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «El que les dé a beber un vaso de agua porque son de Cristo, en verdad les digo que no se quedará sin recompensa. El que escandalice a uno de estos pequeños que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar. Si tu mano te induce a pecar, córtatela: más te vale entrar manco en la vida, que ir con las dos manos a la "gehenna", al fuego que no se apaga. Y, si tu pie te induce a pecar, córtatelo: más te vale entrar cojo en la vida, que ser echado con los dos pies a la "gehenna". Y, si tu ojo te induce a pecar, sácatelo: más te vale entrar tuerto en el reino de Dios, que ser echado con los dos ojos a la "gehenna", donde el gusano no muere y el fuego no se apaga.
Todos serán salados a fuego. Buena es la sal; pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? Tengan sal entre ustedes y vivan en paz unos con otros».
🙏 Comentario
Los pequeños son los predilectos de Dios. Por ello Jesús fue tan insistente en prevenir a la comunidad sobre el pecado del escándalo. Su deseo es que la comunidad sea sal, es decir, que preserve (era la función de la sal en aquel entonces) a los más débiles, y un espacio humano donde todos vivan en paz y fraternidad.
El Señor nos invita a que seamos radicales con las acciones (manos), los pasos (pies) y las miradas (ojos). Cuando estos no nos llevan a Dios, a su amor, a la misericordia, terminan haciendo daño y afectando la comunidad. Pero cuando se encausan para construir Reino, edifican la comunidad y transforman todos los ambientes.
Seguir al Maestro siempre será una aventura que nos lleva a desacomodarnos y a crecer como personas. La vida sacramental nos va cristificando y santificando para asemejarnos al Señor. La comunidad tiene un papel importante en la vida del creyente porque así nos lo reveló Cristo. De ahí que debamos esforzarnos por crecer juntos y vencer así el egoísmo que hoy reina en nombre del crecimiento personal pero sin mirar (ojos) ni caminar (pies) ni obrar (manos) con los demás hermanos.
💌 Mensaje
Jesús nos invita a que seamos radicales con las acciones (manos), los pasos (pies) y las miradas (ojos). Cuando estos no nos llevan a Dios, a su amor, a la misericordia, terminan haciendo daño y afectando la comunidad, a los más pequeños.
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